Si hiciéramos una nube de palabras del año 2020 seguro que entre ellas aparecería la palabra reconocimiento. Al principio del estado de alarma y confinamiento el reconocimiento tomó cuerpo y forma en los aplausos vespertinos que desde las ventanas y balcones hacíamos al personal sanitario, un reconocimiento aún vigente, aunque menos aplaudido formalmente.
Este 2020 hemos aprendido, por si todavía no sabíamos, a reconocer el esfuerzo, el logro o la contribución de las personas que se han situado en la primera línea en la lucha contra esta pandemia. Y si ya sabíamos, lo hemos perfeccionado. El reconocimiento es un ingrediente que, de una manera u otra, todo el mundo necesita, no para alimentar la vanidad (que en algunos casos también) sino para crecer a nivel personal y profesional.
El personal sanitario no es el único que ha merecido, y merece todavía, nuestro reconocimiento, también se lo merece el mundo social, el de los y las profesionales que se dedican a la acción social en toda su amplitud, ya sea en servicios sociales y educativos básicos como especializados, acompañando a las personas que, aparte de las consecuencias sanitarias de la pandemia, también han sufrido y sufren las económicas y sociales.
La acción social también merece un reconocimiento y desde Plataforma Educativa le haremos el nuestro en la 9ª edición de los Premios de Acción Social Maria Figueras y Mercè Bañeras, que celebraremos, como es tradicional, la festividad de Sant Jordi. Convocados desde el año 2013, los Premios de Acción Social mantienen la voluntad de reconocer la labor de personas, entidades, servicios y proyectos que desde la acción social contribuyen a la mejora de la calidad de vida de las personas. Los premios tienen tres categorías, la de innovación social y la de emprendimiento social para proyectos, y la de corresponsabilidad ciudadana, un reconocimiento de carácter personal en el que se pone de relieve la dedicación y contribución de la persona que lo recibe a la acción social a lo largo de su trayectoria.
Dicen los y las expertas que los reconocimientos deben ser honestos, auténticos y genuinos, que deben ser específicos, y por lo tanto es necesario identificar el valor de la contribución o beneficio que el esfuerzo o el logro hayan representado, y que es importante hacerlos públicos, exteriorizarlos, formalizarlos.
Este año, Premios de Acción Social Maria Figueras y Mercè Bañeras de Plataforma Educativa, aparte de hacer los tradicionales reconocimientos al emprendimiento, a la innovación sociales, y a la corresponsabilidad ciudadana, encontraremos la manera de hacer el reconocimiento que, pensamos, también merece la acción social.
Roger Casero Gumbau
Es patrón de Plataforma Educativa (Fundación Resilis) y comenzó a trabajar de educador en un centro de menores (CRAE) en el año 1995; también ha sido director de un hogar residencia para personas con discapacidad intelectual, y desde 2007 coordina un programa de inserción laboral en las comarcas de Girona.
